Desde un perro que atrapó una pelota hasta el luto que se vive al extrañar a una persona a causa de la separación, fueron los temas que inspiraron a estudiantes, profesores, asistentes de la educación y apoderados que ganaron las distintas categorías del Concurso Cuarentena en 100 Palabras, en su reciente versión convocada por el Colegio Instituto San José de Cañete.
Martín Veas Espinoza, del Instituto de Humanidades Alfredo Silva Santiago de Concepción, obtuvo el primer lugar en la categoría talento infantil, de 4° a 6° año básico. Cuenta que su mamá estaba revisando el computador, cuando vio la invitación en la página web y le motivó a participar. “Yo me emocioné porque me gusta escribir. El cuento lo inspiré en hechos reales, ya que vivo en un condominio y todos los días salgo a jugar a la pelota como a las cinco de la tarde con mi papá. Un día iba a anotar un gol y resulta que un perro se cruzó, entonces mi papá dijo ¡lo atajó el perro comepelotas! Esto lo recordé el último día del plazo para concursar, estuve pensando mucho rato y tuve la idea, así que después de recordar ese día comencé a escribirlo”.
Benjamín Sandías Villa, del Instituto de Humanidades San Francisco de Asís de Lota, fue el ganador en la categoría talento pre juvenil, desde 7° básico a 1° medio. Él señala “quise participar en esto porque me gusta la lectura, escribir, y me inspiré en todo lo que está pasando.
De tanto estar en casa, uno comienza a tener se siente extraño. Estuve un buen rato escribiéndolo, salió ese texto y no pensaba en ganar, pero gané”.
Sofía Figueroa Cuevas fue quien representó al Colegio Instituto San José de Cañete entre los ganadores, ya que obtuvo el primer lugar en la categoría talento joven, que reunió a los participantes de 2° a 4° medio. “Mi profesora fue quien me motivó a escribir. Ella me dijo que había un concurso y que quería que yo participara, en lo que ayudó el tiempo libre que teníamos. El cuento se trata sobre el luto que experimenta una persona que extraña mucho a otra, que no se puedan ver no es producto de la cuarentena, pero la separación hace que sea una cuarentena más difícil”.
Entre los padres y apoderados, fue don Rodrigo Sanhueza Zamorano quien se llevó las felicitaciones. Cuenta que “la motivación corrió por parte de mi esposa, funcionaria del jardín, que me invitó a participar. Accedí porque la verdad es que el jardín es un siete, un equipo de trabajo consolidado y agradable, se notan muy profesionales y si podía devolver esta generosidad era participando en esta área. Es primera vez que escribo un cuento, que relataba los sentimientos que uno tiene como ser humano, que se siente tan seguro de la vida pero en momentos como estos, de inestabilidad mundial, nos vuelve vulnerables y cambia las prioridades. Es el momento para reflexionar sobre la rutina y descubrir que hay cosas de mucho valor como la familia, un abrazo”.
En la categoría que congregó a los funcionarios de los Colegios del Arzobispado, la vencedora fue María Angélica Gallardo, del Instituto de Humanidades Alfredo Silva Santiago de Concepción. Su cuento habló del redescubrir las cosas esenciales en este tiempo, “por ejemplo un abrazo, la familia, el estar juntos; cómo la gente se vio forzada a cambiar su rutina de forma vertiginosa y a la vez rescato que la “cuarentena con c” tiene que ver con una c de confianza, caridad, comprensión, cariño y de ser comunidad, muchas palabras que comienzan con esta letra y que tienen que ver con nuestro itinerario pastoral”.
Comunicaciones, Colegios del Arzobispado de la Santísima Concepción